El TDL se caracteriza por un retraso en la correcta adquisición del lenguaje en ausencia de otras causas o trastornos que puedan explicar dicho retraso. Por otra parte, los individuos con TDL pueden llegar a desarrollar problemas de ajuste socioemocional, conductual y escolar debido a las dificultades lingüísticas que experimentan en su cotidiano.
En un artículo del equipo de investigación I+DEL (Investigación, Desarrollo, Educación y Lenguaje), publicado el pasado 16 de marzo en la revista científica International Journal of Environmental Research and Public Health, se analiza qué factores protegen a los niños/as con TDL frente dicho desajuste. Para realizar este estudio se examinó en niños de 5 a 12 años, con y sin TDL, variables a nivel de lenguaje y de cognición, así como de ajuste conductual, emocional y escolar, además de datos familiares y de estatus socio-económico. Los datos aportados por los tutores escolares indicaron que los adolescentes con TDL presentaban un menor nivel de ajuste escolar y de habilidades de adaptación. Los datos proporcionados por los mismos niños indicaban que en los casos de TDL se manifestaba un mayor índice de dificultades a nivel emocional. Pero lo verdaderamente interesante que deriva de este estudio es que el nivel de involucramiento familiar, pero no su estatus socio-económico, actuaban de factor protector de cara a estos problemas de desajuste que pueden llegar a presentar los adolescentes con TDL a distintos niveles y en diferentes ámbitos. Por tanto, ante casos de TDL sería necesario llevar a cabo intervenciones de carácter global, no solo centradas en el individuo y sus dificultades, sino también con acciones a nivel escolar y familiar.