Con el desarrollo de las nuevas tecnologías y formas de comunicación digital dos nuevos fenómenos preocupan a la comunidad científica: el ciberacoso escolar y la adicción a internet entre los jóvenes.
El espacio en línea, donde el anonimato es fácil de conservar, ha generado un espacio en el que el acoso escolar se vuelve difícil de detectar y controlar. En la actualidad, en relación con esta temática, existe un debate en la comunidad científica acerca de una posible población que podría ser especialmente vulnerable a sufrir vivencias de ciberacoso escolar; es el caso de los adolescentes superdotados. Algunos autores defienden que esta población tiene una especial vulnerabilidad de cara a experimentarlo en la figura de víctima, otros autores dicen que tienen más bien una marcada tendencia a realizarlo en el rol de agresor, y otros dicen que la prevalencia, tanto de víctimas como de agresores, en adolescentes superdotados es equivalente a la que encontramos en la población general.
En relación con la adicción a internet, hasta la actualidad no había estudios que estudiaran de forma directa la relación con la población de adolescentes superdotados. No obstante, se podía encontrar en la literatura científica ciertos indicios que sugerían que los niños y niñas superdotados presentaban rasgos comportamentales que, en caso de que se sumasen a problemas de desajuste social, podrían favorecer el desarrollo de dicha adicción en edades adolescentes. Por otra parte, otros estudios apuntaban a que la inteligencia podía actuar como factor protector de cara a estos comportamientos adictivos.
Un artículo publicado por miembros de I+DEL ha aportado un poco de luz sobre este debate tan actual. En su estudio analizaron en una muestra de 122 adolescentes, la mitad de los cuales eran superdotados, la incidencia de vivencias relacionadas con el ciberacoso -tanto en el papel de víctima como agresor-, la incidencia de adicción a internet y la interacción entre ambos fenómenos. Los resultados sugerían que no hay diferencias entre la población de adolescentes superdotados y la población adolescente general en cuanto a la incidencia de ciberacoso ni de adicción a internet. Lo que sí encontraron fue que, en general, la adicción a internet, ligada con conflictos interpersonales (falta de habilidades sociales) juega un papel explicativo importante en la aparición de situaciones de ciberacoso, especialmente entre los jóvenes superdotados.